31 adivinanzas de comidas y alimentos para niños

Adivina adivinanza… ¿Te agrada comer? Diviértete y pasa un rato entretenido respondiendo a estas adivinanzas infantiles de comida, platos, recetas y comestibles. Revela tu sagacidad y audacia jugando a las adivinanzas de comida para jovenes.

 

Aquí tienes una extensa variedad de adivinanzas de comida para jovenes. Prueba suerte y comprueba cuántas adivinanzas infantiles de comida eres con la capacidad de responder con acierto.

¿Qué alimento ese será, que suelen llevar en un cesto y dicen que está más fresco cuanto más caliente está?

Su interior es blanco y dulce. Por fuera peludo y feo. Su nombre asusta a los niños, Pero a mí no me da miedo.

Una cajita chiquita, blanca como la cal, todos la saben abrir, nadie la sabe cerrar.

Tengo duro cascarón, pulpa blanca y líquido dulce en mi interior.

 Soy un viejo arrugadito que si me echan al agua me pongo gordito.

Soy ave y soy llana, pero no tengo pico ni alas.

Ni espero que me lo aciertes ni espero que me bendigas y, con un poco de suerte, espero que me lo digas.

Es como algunas cabezas y lleva dentro un cerebro, si la divido en dos piezas y la como, lo celebro.

El sol las madura, la mano las rompe. El pie las tritura, y la boca las bebe

Después de haberme molido, agua hirviendo echan en mí. La gente me bebe mucho cuando no quiere dormir.

De verde me volví negra y me molieron con tino, hasta que al final del todo, de mí hicieron oro fino.

De la vaca, oveja y cabra vengo, y a muchos niños sostengo.

Blanca soy, y como dice mi vecina, útil siempre soy en la cocina.

Blanca soy como la nieve y me sacan de una caña, aunque soy del otro mundo, ahora ya nazco en España.

Tiene ojos y no ve, posee corona y no es rey, tiene escamas sin ser pez, ¿qué rara cosa ha de ser?

A veces blanquita, a veces negrita y siempre bolita.

Adivina quién soy: cuanto más lavo, más sucia voy.

Blanca por dentro, verde por fuera, si quieres que te lo diga, espera

Amarillo por fuera amarillo por dentro y con un corazón en el centro

Con el dinero lo compro, con los dedos lo deslío, por la cara me lo como.

Soy el jugo de la uva, de la copa el contenido, de la mesa el gran señor, de todos apetecido.

Oro parece, plata no es, quien no lo adivine, muy tonto es.

Te lo digo y te repito y te lo debo avisar que por más que te lo diga no lo vas a adivinar

Tengo cabeza redonda sin nariz, ojos, ni frente, y mí cuerpo se compone tan solo de blancos dientes

Somos blancos, larguiruchos, nos fríen en las verbenas, y dorados, calentitos, nos comen nenes y nenas.

 Mi madre es tartamuda, mi padre es cantador. Tengo blanco mi vestido, y amarillo el corazón.

En verdes ramas nací, en molino me estrujaron, en un pozo me metí, y del pozo me sacaron a la cocina a freír.

Fui a la plaza y las compré bellas, llegué a mi casa y lloré con ellas.

Soy la redondez del mundo, de esperanza estoy vestida y no hay noche para mí, porque conmigo está el día.

Tiene ojos y no ve, tiene agua y no la bebe, tiene carne y no la come, tiene barba y no es hombre.